La tos de las perreras. Cuidados y prevención
Cuando nuestra mascota presenta los síntomas de la tos de las perreras, esta está localizada en las vías aéreas. También conocida como traquebronquitis infecciosa canina (TBI), es una enfermedad producida por varios agentes infecciosos, entre los que destacan: la Bordetella bronchiseptica, el adenovirus canino tipo 2 y el virus de la parainfluenza. La tos de las perreras resulta altamente contagiosa, y aunque parezca que su nombre indique que solo se pueden contagiar en ese tipo de centros, la realidad es bien distinta.
Resulta que esta enfermedad se transmite por el aire y por contacto directo, como si de una gripe se tratara. Aunque cualquier perro, aun viviendo en una casa limpia y con higiene, puede contagiarse de un simple paseo por el parque.
Los signos de la tos de las perreras suele aparecer entre los 3 y 10 días del contacto de nuestro perro con otro que estuviera ya infectado, esta se suele contagiar a través de los estornudos, la tos, o si han compartido alimentos o agua de un mismo plato o bebedero.
En este caso, la única solución que nos queda es la prevención, con la vacuna anual. Aun así, todavía existe el riesgo de contagio, pero los síntomas se minimizan más cuando nuestro perro está vacunado.
Los síntomas que nos indican que ha contraído la tos de las perreras
Notarás cómo tu perro de manera repentina comienza a toser con una tos seca e intensa, mientras hace ejercicio, o cuando paseas con él con la correa, algunas veces simplemente aparece de manera espontánea. En algunas circunstancias, tras un episodio de tos seca se puede producir un vómito blanco espumoso. Siguiendo un tratamiento de antibióticos y antiinflamatorios junto con el descanso, llegaremos a conseguir que nuestro perro se recupere y vuelva a disfrutar de sus actividades. Con los casos que sean más graves se optará por la toma de antibióticos. Hay que tener especial cuidado cuando aún son cachorros, pues la enfermedad es más fuerte en ellos. Ante los casos no complicados se recomienda reposo evitando el ejercicio físico al menos durante una semana.
¿Cómo podemos prevenir la tos de las perreras?
La enfermedad se puede prevenir minimizando el contacto con un grupo grande de perros y mediante la vacunación. La salud de nuestras mascotas se verá potenciada con una correcta nutrición, desparasitaciones periódicas y evitando situaciones de estrés.
Vacunación para la tos de las perreras. Cuando hacerlo.
A día de hoy existen en el mercado vacunas intranasales e inyectables. Se recomienda la aplicación de la vacuna intranasal para cachorros y perros adultos sanos. Para los que son todavía cachorros se recomienda administrarselas a partir de las tres semanas de edad, y en perros adultos 72 horas antes de acudir a un lugar donde exista riesgo de infección, como por ejemplo, en verano, que es muy dado llevar a nuestras mascotas a refugios caninos mientras los dueños están de viaje por vacaciones. La revacunación es anual.
Por otra parte, la aplicación de la vacuna inyectable se puede poner en cachorros entre las cuatro y seis semanas de edad y después aplicar una segunda dosis de refuerzo entre 2 y 3 semanas más tarde. El comienzo de la inmunidad se da a las 2 semanas tras la aplicación de la vacuna. Se recomienda la aplicación de una dosis de recuerdo anual tanto en cachorros como en perros adultos.
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